Deje al chofer a cargo de la nave planicie de Lluvia y le
entregue 100 marionetas como sus guardias.
“Es hora”
Todos avanzamos hacia el centro de la ciudad, nuestro
primer destino es la casa de mis supuestos padres.
Esta ciudad a diferencia de todas las que he visitado,
esta con las calles muy concurridas, aquel que no sea bueno con las multitudes
le aconsejo no poner en su trayecto, este lugar.
Hay muchos puestos, según parece es muy prospera en
comercio.
Me giro hacia atrás.
“¡Eh!, ¿A dónde fueron todos?”